En la actualidad, las personas vinculadas a comunidades web, o plataformas como Flickr o Facebook, se encuentran creando un tejido de experiencias humanas. Sea a través de vídeo, imágenes, texto o hipertexto las personas se definen a partir de lo que relatan. Dentro de ellas uno puede identificar grupos con intereses más específicos y practicas particulares, Subgrupos web.
En el mundo físico, el narrador es un individuo, en Colombia posee un nombre, derechos, y número de identificación, y se encuentra sometido ante unos acuerdos de convivencia como la Constitución Política. Ahora, en Internet, el narrador es un usuario. El usuario es una construcción del individuo, el lo define a partir de sus intereses, gustos o intenciones. Un individuo puede tener así mismo diferentes usuarios, y diferentes formas de estar inscrito a una cultura web.
Al igual que el individuo, el usuario se encuentra inscrito dentro de los acuerdos que tiene cada comunidad web, tiene diferentes derechos como la de tener un nombre, y en algunos casos un apodo.
Como seres sociales, cuando nos pasan cosas buenas, malas o insólitas nos gusta contarlas, compartirlas, es decir, relatamos nuestras experiencias, articulamos una serie de acontecimientos en un espacio y en un momento en el tiempo. La manera en que se ordenan los relatos en las comunidades web, está en función del espacio y tiempo, simulando la realidad, el espacio es un espacio virtual, y el tiempo es el registro en el que sucedió el aporte del usuario.
Los usuarios utilizan los recursos del hipertexto (hipermedia) para articular los relatos y así poder interactuar con el público que tienen. Sus narrativas individuales siempre están inscritas en prácticas culturales puesto que como individuos, hacen parte de una cultura específica. Es decir que así el usuario haga parte de una comunidad virtual, sin lugar geográfico, el modo que relatara estará mediado por su vida, cultura y educación.
El modo en el que el usuario se refiere a sus experiencias puede reflejar el entorno cultural al que el individuo pertenece. No se trata de conocer al individuo con precisión a partir de la narrativa del usuario, se trata más bien de identificar rasgos más amplios, por ejemplo que idioma maneja, o que expresiones emplea.
Igual el usuario no se encuentra solo inscrito en una plataforma web, o una comunidad virtual, si no que así mismo se encuentra participando de subgrupos sociales, por ejemplo en Facebook por más que el usuario haga parte de la inmensa red de usuarios, el narrador está enmarcado dentro los grupos a los que haga parte y los contactos que tenga. Así mismo las diferentes narrativas se agrupan, construyen y comparten valores culturales, como lo fue la marcha nacional a mitad del presente año: “No más FARC”.
El caso anterior nos sirve para evidenciar que estos relatos están situados culturalmente, y para su comunicación existen diferentes convenciones como es el idioma, y pueden portar características culturales u opiniones dominantes como lo pueden ser visiones políticas sobre el conflicto con la guerrilla.
Estas comunidades web pueden tener relatos que portan ideas dominantes en una sociedad, como también pueden dar voz a aquellos grupos no tan populares. Los usuarios hacen parte de diferentes Subgrupos, unas más grandes que otras, y así mismo tienen diferentes expectativas sobre sus relatos. Los relatos en la web son parte de un conjunto de mecanismo culturales por medio de los cuales se construye imaginarios; es decir las narrativas del usuario no están aisladas de la el ambiente social y político en el que se encuentra el individuo.
Las narrativas web están mediadas por el uso que tenga el usuario sobre el hipertexto, esta forma de comunicación le permite controlar como son presentados sus relatos y como atraer a su publico.
Es inherente al uso de la tecnología hipertextual que el lector es también escritor, y que ante la presentación de estos relatos cualquier otro usuario puede empezar una conversación. Un diálogo que a partir de experiencias humanas y los imaginarios de los diferentes individuos.
En la web esto no ocurre de forma natural, al igual que en nuestra cotidianidad tiene que haber un espacio, como lo puede ser la comunidad web, unos acuerdos, como lo puede ser el idioma, y además se tiene que cautivar al otro usuario a participar.
Las narraciones son siempre una comunicación para alguien, ya sea este individual o colectivo. Cuando se narra, ya sea en el mundo real o virtual, se entra en conversaciones, que van sirviendo para tejer redes de relaciones, de puntos de vista. De alguna manera, las interacciones virtuales van construyendo diferentes sentidos colectivos que no niegan la individualidad. Estos hacen referencia a la vida cotidiana, a la política, a la religión, al arte.
viernes, 19 de septiembre de 2008
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